UN CORREDOR SOBRE LA CINTURA DE MÉXICO

De Porfirio Díaz a la fecha

El Corredor Transístmico es un proyecto reciclado que viene caminando desde gobiernos anteriores, desde Porfirio Díaz a la fecha. Nada más le han cambiado el nombre. Antes era el Plan Puebla Panamá y ahora Corredor Interoceánico, Corredor Transístmico, el nombre que sea.

A la región han llegado varios megaproyectos, como la generación de energía eólica y las líneas de alta tensión por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), pero hasta ahora no hay una información clara de en qué consiste el Corredor Interoceánico. Hemos estado investigando que es un proyecto que será financiado por empresas extranjeras y que consiste en la habilitación de un tren rápido de carga en beneficio de los grandes empresarios, y que traerá también un gasoducto que va a atravesar la zona y representa un peligro para las comunidades.

También viene el paso de una línea de alta tensión en la región que atravesará Oaxaca y Veracruz, y la habilitación de una supercarretera de ocho carriles. Incluye además la modernización del puerto de Salina Cruz y el de Coatzacoalcos para poder trasladar gas a China, que es lo que tienen contemplado. Aquí en la región hemos observado que han estado ingresando chinos, japoneses, extranjeros que han estado caminando los últimos días por acá. Ya están llegando los empresarios a visitar la zona.

La modernización para los pueblos significa que se van a afectar sus comunidades. En Salina Cruz se afectarán muchas colonias y pueblos cercanos al puerto. Los derrames que han habido han afectado a los pescadores económicamente, y Pemex no ha respondido por los daños. Ahora se pretende ampliar y modernizar un puerto que dañará ambientalmente a los pueblos cercanos. Entre más grande el puerto, se genera un impacto ambiental mayor.

Están dejando a todos los migrantes centroamericanos aquí para contratar mano de obra barata para las maquiladoras y para que puedan servir al gran capital. Es lo que viene, ya está anunciado. Hay un pacto de por medio entre Andrés Manuel y Donald Trump, un acuerdo de invertir para que toda esa mano de obra sean los migrantes que se quedan aquí a trabajar.

Para la población local están anunciando que habrá empleos, pero a bajos salarios. No contamos con mano de obra especializada en trabajos de maquinaria, y necesariamente van a tener que traer a gente especializada, entonces a la mano de obra que van a contratar de aquí le van a pagar lo mínimo.

Juana Ramírez Villegas
Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (UCIZONI)
Matías Romero, Oaxaca

En Coatzacoalcos somos ejemplo de lo que pasará en el Corredor si no se hace nada

Los vicios que tenemos en Coatzacoalcos, como la contaminación, el desempleo y la violencia, sin duda se reproducirán en todo este Corredor Transístmico, porque el gobierno no está generando capacidades en las personas para que busquen lo que desean y se construyan o reconstruyan, sino que está respondiendo al poder económico. Somos el ejemplo de lo que pasará en el Corredor si no se hace nada.

Ramón García Sánchez
Movimiento Regional Indígena en Defensa y Respeto por la Vida
Coatzacoalcos, Veracruz

Estamos tratando que el Corredor ya no lo administren ellos, debemos ser nosotros los trabajadores

Ahorita, con el anuncio del Corredor Transístmico, están los mismos líderes charros ambicionándose por estar en el poder, se sienten inflados como los guajolotes, sin tomar en cuenta los derechos de los trabajadores, de los jubilados, los liquidados. Estamos tratando de que el Corredor ya no lo administren ellos, debemos ser nosotros los trabajadores. No queremos que metan las manos.

Nos prometieron mayor información sobre el proyecto. Estamos en eso.

Juana Santos Gómez
Movimiento Sindical Ferrocarrilero Demetrio Vallejo Martínez, sección 13
Matías Romero, Oaxaca

Nos dijeron que es un hecho que se va a hacer

Para el nuevo proyecto federal que se llama Corredor Interoceánico o Transístmico a nosotros no nos tomaron en cuenta para nada. Por medio de las noticias fue que escuchamos del proyecto, y entonces también por eso se hizo todo esto del bloqueo, por un lado para que nos den lo que nos deben de nuestra liquidación y por otro para que nos tomen en cuenta.

Nos dijeron que es un hecho que se va a hacer, que ya está autorizado el presupuesto del Corredor y que habrá mucha fuente de trabajo, que se va a empezar desde Mogoñé hacia La Mata, donde quitarán todas las curvas que hay, porque los trenes van a correr arriba de los 70 kilómetros por hora.

Tenemos confianza en que este gobierno nos cumpla.

Ernesto Ramírez Aragón
Presidente del Movimiento de Ferrocarrileros Demetrio Vallejo Martínez
Matías Romero, Oaxaca

A ver si el gobierno nos hace caso de dejarnos libres

Con el Corredor Transístmico vamos a llevar la misma lucha, es la continuación. A ver si el gobierno nos hace caso de dejarnos libres. Hemos ido a los lugares donde ellos quieren entrar, hicimos asamblea en Salina Cruz con casi todos los pueblos. Es una lucha que estamos haciendo para que no se haga ese tren transístmico.

Roberto Santiago Martínez
Representante del consejo de ancianos
Álvaro Obregón, Oaxaca

Este corredor industrial no sólo es el intercambio de mercancías de un lado a otro

El tren transístimico es un corredor industrial en el Istmo de Tehuantepec que se ha llamado a lo largo de la historia de diferentes maneras. Primero fue el proyecto Alfa Omega, el proyecto del canal, que pretendía utilizar los cuerpos de agua que vienen desde Coatzacoalcos y romper parte de la laguna superior e inferior de aquí para que entraran los barcos, pero vieron que era muy complicado. Finalmente optaron por un canal seco, pero no se pudo hacer y no lo lograron concretar. Porfirio Díaz lo que logró fue instalar el tren.

Con el tren transístmico porfirista había comunicación interoceánica, tanta que mucha gente de la región del Istmo de Tehuantepec llegaba a la otra parte del Istmo, a Veracruz, a vender sus cosas y a trabajar. Prueba de esto es que tenemos una gran población zapoteca del otro lado, en Coatzacoalcos, Minatitlán y Acayucan. Sirvió para la comunicación, para el auge petrolero y fue parte del corredor industrial.

No lo pudieron concretar para pasar mercancías de un lado a otro, que siempre ha sido el sueño de los grandes gobernantes. Es hasta ahora que el actual gobierno parece que sí lo hará realidad. En los otros momentos ha habido mucha oposición, además de problemas de concreción por el tema económico. Pero en este momento ya muchos han alzado la mano para traer los trenes. Es justo la ocasión, porque es el momento del capitalismo mundial, del fenómeno de agotamiento del capitalismo que requiere más recursos, y si requiere de más recursos, requiere de capital.

Este corredor industrial no sólo es el intercambio de mercancías de un lado a otro, sino también es el imitar el modelo de los chinos, que sacan los barcos de allá con toda la materia prima, en el trayecto la vienen armando y cuando llega acá ya está todo hecho. Lo que quieren aquí es lo mismo: traer partes de los productos para que se vayan haciendo en el corredor y lleguen a la otra parte ya transformados.

Esta es la nueva forma para mover mercancías, para la cual utilizan mano de obra barata, gente pobre, despojada, precarizada, como los que vienen de Centroamérica. Entonces tenemos que otra función del proyecto transístmico es detener en el corredor industrial a quienes van a transformar esas mercancías. Estamos viendo el triste papel que está haciendo el gobierno de México frente a las exigencias de Donald Trump. Está la Guardia Nacional, que está instalada contra mucha gente que no estamos de acuerdo, contra amparos que se han interpuesto. Ellos están ahí cumpliendo la función de contener a los migrantes, en lugar de acabar con la violencia, la delincuencia y el narcotráfico.

Bettina Cruz Velázquez
Asamblea de Pueblos del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio (APIITDTT)
Congreso Nacional Indígena (CNI)
Juchitán, Oaxaca

Afecta nuestra forma de vivir

El Corredor Transístmico o el megaproyecto del Istmo, o Plan Puebla Panamá, que para nosotros es lo mismo, afectará a nuestras comunidades de Los Chimalapas. El Istmo somos todos, entonces sabemos muy bien que afectará directamente a los compañeros de Juchitán, Matías Romero, Coatzacoalcos, Salina Cruz, pero a un lado estamos nosotros, en la selva.

Es un megaproyecto, eso quiere decir que es gigante, que no solamente es el Corredor Transístmico, que no solamente es el tren bala, que no sólo es que se va a agilizar más el comercio. Eso es mentira. Atrás hay más que no se quiere decir, por ejemplo la extracción de nuestros recursos naturales. Aquí tenemos madera, minerales, un chingo de vegetación, animales, infinidad de cosas. Y ese corredor afecta todo esto y también nuestra forma de vivir. Nos la van a cambiar.

Domingo Jiménez Jiménez
Comunidad de Benito Juárez, municipio San Miguel Chimalapa, Oaxaca

Las empresas pusieron el ojo en estas tierras

Desde antes de la Conquista nos han tratado de expulsar del Istmo, pero finalmente estamos en esta franja de tierra de tres kilómetros de ancho por 40 de largo, aproximadamente, rodeada de lagunas. Estas tierras, donde convergen vientos del Pacífico y vientos del norte, son asechadas por las empresas eólicas.

Desde los noventas empecé a escuchar en las asambleas diocesanas de Tehuantepec sobre Plan Puebla Panamá, luego oímos de las empresas eólicas, pero no sabíamos que aquí en San Mateo nos podía tocar. Resultó que sí, que las empresas pusieron el ojo en estas tierras, y desde el 2004 ya querían entrar a instalar sus aerogeneradores. Y ahora vienen por más.

Beatriz Gutiérrez
Monapakuy Organización Comunitaria
San Mateo del Mar, Oaxaca

Lo que viene para los pueblos indígenas es el desplazamiento

La intención de controlar el Istmo de Tehuantepec con intereses geopolíticos y geoeconómicos viene desde las invasiones del siglo XIX. La invasión estadounidense de ese siglo es muy ilustrativa en este sentido. En 1846-1847, cuando se firmó el armisticio, Estados Unidos pidió el libre tránsito de mercancías y personas a través del Istmo de Tehuantepec, pero no fue posible porque ya se había concesionado a los ingleses.

Después, en 1907, Porfirio Díaz inauguró el carril transístmico, que se convertiría en el principal medio de movilidad para el comercio intenso que se desató de 1907 a principios de 1915, antes de la apertura del canal de Panamá. Eran más de 60 ferrocarriles diarios con determinadas cantidades de contenedores entre Salina Cruz y Coatzacoalcos. Se abrió después el Canal de Panamá y todo se vino para abajo.

Ahora, con el corredor planeado, el manejo de grandes cantidades de mercancías por contenedores no será de los Estados Unidos ni de los alemanes ni de los franceses, será de los chinos, que son quienes están produciendo y manufacturando grandes volúmenes.

Y en todo este trasiego mercantil, lo que viene para los pueblos indígenas es el desplazamiento, prácticamente una forma de genocidio que muy difícilmente se reconstituiría en las próximas décadas. La palabra genocidio se ha manejado incluso retóricamente en los más de 500 años que llevamos como pueblos indígenas, pero ahora la imposición de estos megaproyectos en el Istmo de Tehuantepec sí sería letal para la cultura de quienes habitamos estos territorios. Ojalá no se dé y que prive la resistencia de nuestras comunidades y de nuestros pueblos, y que eviten la materialización de todas esas inversiones.

Para concretar el proyecto dudo que les alcance este sexenio. No les va a alcanzar ni siquiera para modernizar las vías ferroviarias que existen entre Coatzacoalcos y Salina Cruz, porque tienen que pasar por Santa Cruz Tagolaba, por Tehuantepec, por los bienes comunales de Ixtepec, por La Mata, por Petapa, Matías Romero, Guichicovi. Estamos hablando de un conjunto de comunidades, en su mayoría de propiedad social de la tierra como ejido o como comunidad agraria, en donde no será tan fácil dirimir el rezago agrario existente.

Si se va a respetar el estado de derecho, no será tan fácil intsalarlo. Si lo van a realizar por la vía rápida y pasando por encima de los derechos indígenas, agrarios, de libertad de expresión y de manifestación y de los derechos territoriales como pueblos, es probable.

Con la presencia de la policía federal, en su momento, y ahora de la Guardia Nacional, hemos visto aumentar el número de feminicidios, el número de represión a las manifestaciones, desapariciones de jóvenes y adolescentes que antes no veíamos. Empieza una forma de descomposición. Podemos decir sin exageración que es una estrategia para desactivar cualquier forma de resistencia contra estos proyectos, llámense mineros, super carreteras, parques eólicos, bioprospección, privatización del agua, todos los que constituyen este racimo de proyectos que integran el gran proyecto del Corredor.

Carlos Manzo
Asamblea de Comuneros de Unión Hidalgo
Unión Hidalgo, Ranchu Gubiña, Oaxaca

¿Yo para qué quiero un tren transístmico?

Con el Corredor Transístmico son empresas transnacionales las que están detrás y no hay información suficiente. Nada más dicen que es un tren y que trae progreso. Nosotros crecimos viendo pasar el tren hace ya muchos años, y la gente cree que es lo mismo, pero no.

Si me preguntan a mí, ¿yo para qué quiero un tren transístmico? ¿En qué me beneficia? Por supuesto que a las comunidades indígenas no les favorece, pero lo están imponiendo, aunque muchos pueblos estemos en contra.

Los parques eólicos se relacionan con el tren transístmico porque será su medio de transporte y generarán energía para las empresas del Corredor. Las eólicos y las mineras son las que van a ocupar el servicio. A mí no me sirve un tren, yo lo que quiero es apoyo para el campo, para poder seguir trabajando y para que el campo tenga vida. ¿Cómo quieren las autoridades estatales y federales que nos dediquemos al campo si nos vienen a plantar aerogeneradores, si vienen a explotar la mina?

Guadalupe Ramírez Castellanos
Mujeres Indígenas en Defensa de la Vida
Unión Hidalgo, Oaxaca

260 kilómetros de afectaciones a once culturas indígenas

El proyecto actual denominado Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, presentado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, es el Programa de Desarrollo Integral del Istmo de Tehuantepec del expresidente Ernesto Zedillo, quien lo dio a conocer en agosto de 1996, ubicando los 80 municipios que impactaría y estableciendo los componentes de qué inversión hacer, en qué comunidad y en qué municipio, teniendo como ejes el tren bala de carga, la autopista y la modernización de los puertos.

En 2004, López Obrador publicó el libro Un proyecto alternativo de nación: hacia un cambio verdadero, que dentro de sus 26 puntos contempla el Programa de Desarrollo del Istmo de Tehuantepec. En su campaña de 2006 fue uno de los puntos que más lo conflictuaron con el EZLN. Y luego, en 2012 publicó los 100 puntos de su Proyecto de Nación, donde el punto 33 es el Programa de Desarrollo Integral del Istmo.

El 12 de julio de 2018, apenas once días después de haber sido electo, Andrés Manuel envió una carta a Donald Trump en la que le explica que el Istmo de Tehuantepec será ofrecido a la inversión para proyectos de extracción petrolera, minas, parques eólicos, plantas armadoras, plantas maquiladoras y, como eje, el ya señalado tren bala interoceánico de carga, junto con la brutal modernización de los puertos de Coatzacoalcos y Salina Cruz, que serán ampliados para tanques y buques mercantes de gran calado que actualmente no pueden entrar.

Hablando sólo de Salina Cruz, el impacto será brutal porque el Golfo de Tehuantepec es el de mayor diversidad biológica marina de México, junto con el Mar de Cortés. Además de su impresionante diversidad marina, alimenta y oxigena las lagunas ikoots, pero al dragar y ampliar el rompeolas, van a romper todo el ecosistema.

Son 80 municipios afectados por el megaproyecto del Istmo, 31 en Veracruz y 49 en Oaxaca. Impacta a once culturas y pueblos indígenas, ocho de ellas con presencia ancestral y tres que han sido reubicadas por gobiernos, pero que igual ahora se asumen como pueblos que defienden el Istmo. Los pueblos locales originarios son los nahuas, zoques-popolucas, zoques-chimalapas, mixes, zapotecos, ikoots, chontales y chocholtecos, mientras los reubicados son mixtecos, chinantecos y tsotsiles.

En línea recta son 260 kilómetros de Coatzacoalcos a Salina Cruz, pero el cálculo con curvas es de 320 kilómetros impactados. El organismo público descentralizado para el desarrollo del Istmo y la Secretaría de Hacienda anunciaron que se construirán diez parques industriales a lo largo de esa ruta.

La carta del presidente AMLO a Trump y luego el decreto para el Corredor refieren que el Istmo se va a decretar zona libre de impuestos, con un subsidio del Estado para la construcción de infraestructura. La energía eléctrica, el agua, el terreno, todo será subsidiado por el pueblo mexicano para que vengan a invertir y a poner empresas.

Este megraproyecto se divide en dos: uno con proyectos muy depredadores, muy destructivos; y al mismo tiempo otros dizque conservacionista, de lo que se denomina capitalismo verde. Es como una isla de conservación para el negocio “verde”, rodeado de un océano de destrucción para los negocios convencionales.

Los proyectos de muerte y de destrucción brutal son las minas, los parques eólicos, dos hidroeléctricas, la extracción petrolera —incluso con fracking— y nuevas carreteras. Esos son los de impacto brutal, pero están los otros, que son más peligrosos, porque estas montañas de Chimalapas producen 40 por ciento del agua del país, la regulación climática de todo el Istmo de Tehuantepec con sus montañas y sus bosques, y generan oxígeno para todo el sureste, pues tienen la diversidad biológica más grande de México.

Una hectárea de selva alta y bosques de niebla llega a tener 900 especies de árboles distintos, de acuerdo a un estudio realizado por Víctor Toledo, actual secretario de la SEMARNAT. Es incontable lo que tienen de arbustos, plantas herbáceas y microflora en subsuelo. Hay animales que ya no hay en otro lado. Están los estudios que han hecho los expertos del jaguar, que son los mismos que hicieron en Calakmul, y señalaron que aquí, en Los Chimapalas, está el reservorio de la mayor población de jaguares de México, no sólo en número, sino también en variedad.

Los propios empresarios hablan de bancos genéticos. De la diversidad biológica lo que les interesa son los genes, y aquí está la mayor diversidad de genes. El vicepresidente Alfonso Romo —socio de Monsanto— es un experto en biotecnología igual que Jorge Villalobos, secretario de Agricultura. Son expertos en biotecnología y saben lo que significa un reservorio de genes de esta naturaleza, y lo que representa apropiarse de ellos y usarlos para la producción de transgénicos y alimentos biotecnológicos.

Es un reservorio de genes y, a la vez, dicen ellos, una “fábrica” de agua, una zona productora de oxígeno, de plantas medicinales. Les interesa extraer el saber indígena, sacar la planta y copiar la estructura, registrarla, patentarla y luego venderla a precios multimillonarios. Ese es el capitalismo verde.

Miguel Ángel García Aguirre
Coordinador regional del Comité Nacional para la Defensa y Conservación de Los Chimalapas y Coordinador general de la asociación civil Maderas del Pueblo
Los Chimalapas, Oaxaca

Se supone que va a generar empleo y luego ingresos

Ahora estamos viendo cómo se conectan las minas con el proyecto transístmico, porque se supone que va a generar empleo y luego ingresos. Pero la gente no se fija en el daño social que habrá, y por eso encontramos gente que sí quiere que se explote el territorio.

Tenemos muy poca información del Corredor porque lo manejan políticamente. Estamos en contra de la situación y le decimos a la gente que ese progreso es mentira, porque daña los recursos naturales y provoca daños.

Julio Emilio Pérez
Santo Domingo Zanatepec, Oaxaca

Representa una amenaza para nuestra vida comunitaria

También está el recién proyecto interoceánico, el Corredor Transístmico. Nosotros platicamos con las autoridades de las comunidades y dijimos que representa una amenaza para nuestra vida comunitaria porque trae consigo la concesión de agua por 25 años, y toda esa agua la van a extraer de la Sierra. Habrá la instalación de maquiladoras y de empresas en todo ese Corredor y eso amenaza nuestro territorio y nuestra vida, además de que pretenden activar un gasoducto. Eso nos pone en alerta, porque toda esta zona en el sexenio pasado estaba prevista para exploración de hidrocarburos.

Maribel C. Cruz
Proceso de Articulación de la Sierra de Santa Martha
San Juan Volador, municipio de Pajapan, Veracruz

Nuestro istmo es parte de un circuito mundial de mercancías por su ubicación estratégica

Históricamente el Istmo de Tehuantepec ha sido una zona disputada por su papel de corredor interoceánico y de corredor entre el Altiplano y Centroamérica, donde se disputa también la gran cantidad de recursos naturales que tiene. Ahora este viejo-nuevo proyecto transístmico se vuelve a intentar en un momento en el que nuestra región ha sido convertida en una zona productora de energía.

El Istmo de Tehuantepec es la sede desde hace 112 años de la primera refinería que se fundó en el país, en Minatitlán, relacionada con la construcción del primer ferrocarril porfirista. Es una zona que tiene recursos pesqueros, rica en recursos forestales, pastizales, tierras de altísima calidad. También es el asiento milenario de pueblos indígenas de la región y, en los últimos 60 años, de indígenas de otras tierras, como los chinantecos desplazados por la construcción de una presa, los mixtecos que colonizaron la región en los años 60 y los tsotsiles, que llegaron a la zona de conflicto de Los Chimalapas.

Es una zona con valor estratégico por ser un corredor transístmico. Hay dos zonas en el mundo que tienen estas características. El istmo mesoamericano, que va de Panamá hasta Tehuantepec, y el Canal de Suez. Las dos zonas han sido de conflictos, guerras y disputas. Nuestro istmo es parte de un circuito mundial de mercancías con una ubicación estratégica en términos de geopolítica.

No es de extrañar que este proyecto se esté renovando desde la época de Porfirio Díaz, todo el siglo pasado y parte del presente con los gobiernos del PRI y del PAN. Siempre hubo proyectos que intentaron hacer la conexión como corredor inteorceánico, con el interés de empresas extranjeras y con la complicidad de funcionarios mexicanos. El proyecto del gobierno actual, ya de otro partido, es ni más ni menos que un refrito de los viejos proyectos. Lo que busca es construir un corredor multimodal. No solamente es el ferrocarril, sino también una vía carretera más rápida, un gasoducto y un tendido eléctrico de alta tensión.

Se utilizará mano de obra de la región porque aquí no hay mano de obra especializada. Recientemente, cuando se hizo el trabajo de modernización de un gasoducto, todo el personal que vino a trabajar era de Tamaulipas o de Chiapas.

Lo que tenemos es un nuevo proyecto diseñado desde fuera para cumplir con la lógica de acumulación de capital salvaje que se hace en la región a costa de los derechos de la población local. Lo más grave de esta época, y a diferencia de los otros proyectos que se han impuesto y han dado lugar a la resistencia de las comunidades, es que ahora se actúa de una manera muy perversa. No hay información, el gobierno la ha ocultado porque no la tiene y todavía no hay un plan maestro, que se lo encargó a una empresa de Singapur. No saben qué tipo de ferrocarril será ni tienen claras muchas otras cosas.

Tienen definiciones más claras del tendido eléctrico, que es un proyecto de alta tensión que iría de la zona de Ixtepec, aquí en el Istmo, a Morelos, a la zona donde está la lucha de los pueblos en contra del Proyecto Integral Morelos. Se han negado a darnos información, pero nosotros nos hemos enterado de qué se trata por vías marginales.

La idea es conectar la producción de energía que están generando las empresas eólicas españolas, italianas y francesas en el Istmo, para abastecer zonas industriales del centro del país. Ese proyecto creo que sí lo tienen claro porque ya hay estudios, definiciones, e incluso ya se ha adquirido el derecho de tierra de algunas personas, principalmente de particulares.

También del gasoducto hay un estudio. Están los chinos muy interesados en operarlo y creo que ya hay definiciones en lo correspondiente a la ampliación de uno de los puertos en Salina Cruz para utilizar tanto la bahía de Salinas del Marqués como la bahía de Guelaguechi, porque el puerto de Salina Cruz no tiene las dimensiones que se necesitan. Parece que ahí hay por lo menos un estudio a raíz de un proyecto que tiene Pemex para la ampliación de un puerto petrolero. Pero en lo que corresponde al ferrocarril no hay definiciones muy claras, y no hay información.

De lo que hemos investigado, sabemos que el Corredor Transístmico es más de lo mismo. Se trata de continuar con el uso del territorio de los pueblos originarios para enriquecer a los propietarios de las empresas eólicas. Hace pocos días se inauguró un nuevo parque eólico, propiedad de Mitsubishi, Eólica del Sur, que es la empresa que enfrentamos y que fue derrotada en la zona ikoots de Santa Teresa. Ahora entraron por acá, cambiaron de escenario y ya tienen más de 130 aerogeneradores. Es el primer parque de la Cuarta Transformación, y fue con el despojo de las tierras.

Carlos Beaz Torres
Coordinador de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (UCIZONI)
Rincón Viejo, Santa María Petapa, Oaxaca

No sabemos qué haya más adelante

Del Corredor Transístmico tenemos conocimiento porque a nuestras asambleas llegaron compañeros a decirnos. A nosotros nos afecta, pero de forma indirecta, no como a Matías Romero, Ixtepec, Juchitán, que están en la línea transístmica. No sabemos qué haya más adelante, pero por la forma en que lo platican yo pienso que sí dañará mucho a las poblaciones.

Óscar Marín Gómez
Representante de los bienes comunales de Unión Hidalgo, Oaxaca

Las demandas de las comunidades son otras

Hay pueblos que serán afectados directamente por el Corredor y que no han sido consultados. Las demandas de las comunidades son otras, por ejemplo seguridad, salud, conflictos agrarios y territoriales. La agenda de los pueblos es distinta a la que tiene el nuevo gobierno.

Hay pueblos que están siendo impactados por los derrames de combustible, hay otros que tienen la expropiación de tierras y son engañados con los contratos. No hay información sobre cuál va a ser la afectación ni los alcances del proyecto. Sabemos que hay afectaciones, pero no exactamente cuáles. Tenemos identificadas las pérdidas de tierra, las invasiones, pérdida de biodiversidad, de selvas, bosques, pero no hay información real de los impactos.

Omar Martínez Hernández
Red de Defensores Comunitarios de los Pueblos de Oaxaca (REDECOM)
Matías Romero, Oaxaca

Lo presentan como progreso, pero no lo es

Las empresas son parte de un proyecto inmensamente grande, el llamado Corredor Transístmico, ese gran proyecto interoceánico que está directamente enlazado con los inversionistas y las grandes empresas extranjeras, que pretenden invertir en este territorio con megaproyectos presentados a las comunidades como progreso y desarrollo, pero que en realidad no son eso para la comunidad.

Daniel Cirilo López
Colectivo Gulucheño Por la Vida
Santo Domingo Zanatepec, Oaxaca

No sé qué diablos pase, pero realmente puede haber un choque

I

Lo que quieren hacer es acabar con los recursos y desaparecer los bienes comunales. Acabarán con los pueblos indígenas de toda la región. No sé qué diablos pase, pero realmente puede haber un choque, porque al menos en el Istmo han hecho comentarios de que no lo permitirán porque es acabar con todo.

Si el tren bala, que yo me lo imagino como un balazo, no permitirá a nadie subirse, entonces nadie lo detendrá.

Desde hace años Zanatepec protesta porque se han dado permisos del mismo gobierno federal para la empresa minera, y el comisariado de San Miguel le da continuidad, da el permiso y ellos siguen explorando. Cuando entren a trabajar no sé qué pase. Al final de cuentas las consecuencias las viven los niños. Ellos reciben el apoyo que da el gobierno, pero no peleamos por el dinero. Que quede bien claro: peleamos por que respeten nuestra costumbre, nuestro pueblo y nuestra tierra.

II

No en cualquier lado puedes encontrar este tipo de biodiversidad. Lo que queremos nosotros como comuneros es que nos ayuden a preservarla. Dicen que el tren bala beneficiará y hablan de puros beneficios, pero no de lo que afectará. Unámonos a la defensa de la montaña, de nuestra biodiversidad.

III

La organización nos ha ayudado, nos ha apoyado a tener experiencia, no con recursos económicos, aunque hay mucha gente que los persigue. Yo llamo recursos y conocimientos de cada uno de nosotros a cuando valoramos nuestros bienes comunales para proteger lo que tenemos todavía. Si ahorita que los tenemos no instruimos a nuestros hijos, esto se acabará con el tiempo.

Se habla de muchos proyectos mineros, del tren bala y de muchos proyectos que el gobierno persigue. También podemos hablar de las reformas de leyes que nunca tratan el fondo del problema. Muy bonito te dicen que habrá empleo y otras tantas cosas, pero con el tiempo esos recursos se acaban.

IV

Muchísima gente opina en contra del Tren Maya y en contra del dizque desarrollo del Istmo. Mucha gente ve el potencial que hay en el Istmo, no sólo en Chimalapas, y todos nos damos cuenta de que este planeta es el desarrollo de los ricos, no de los pobres. Los pobres también nos queremos desarrollar, pero debemos implementar proyectos sustentables, racionales.

No nada más digamos que no desarrollemos, que no aprovechemos, hagamos y aprovechemos tal como deben ser las cosas. Lleguemos a un plan con la autoridad, hagamos guiones de trabajo y avancemos, porque los pueblos no avanzan nada, pero el gobierno sí.

Asamblea de la comunidad Benito Juárez
San Miguel Chimalapa, Oaxaca

Pelear contra Peña Nieto era más fácil

Y ahora, también con este gobierno, con la división que está haciendo en los pueblos, se hace aún más difícil la organización, poder cuestionarlo, porque está dando, sí, pero como si fuera piñata. Dale al pueblo pan y circo. A los que nos oponemos nos dicen que somos gente que siempre estamos en contra de todo, que somos intolerantes, que estamos locos, que por qué interpelamos a AMLO si está haciendo cosas buenas. Hace poco que fuimos a la consulta hubo que arrebatar el micrófono y hablar, y después me empezaron a gritar que yo lo que quiero es dinero.

Pelear contra Peña Nieto era más fácil, porque cuando hacíamos una denuncia había eco, y ahora no hay lo mismo, porque mucha gente que antes era nuestra aliada, ahora piensa que las cosas realmente van a cambiar profundamente. Nos dicen que tenemos que creer en que están haciendo las cosas bien, pero no, no están haciendo las cosas bien. Y preguntan que por qué no lo decíamos antes, ¡pero cómo no¡, si siempre lo hemos estado diciendo.

Ahora los aliados que antes teníamos ya no lo son, están del otro lado. Y se siente que AMLO sabe cómo trabajamos en las comunidades, en las organizaciones. Es como el caballo de Troya, como si hubiera habido un trabajo de inteligencia previo. Ves ahora a los indígenas educados, leídos, del otro lado, tratando supuestamente de hacer el sueño de que se cumplan los derechos de los pueblos. Yo los escucho y me pregunto si son ingenuos o si lo creen de verdad.

Bettina Cruz Velázquez
Asamblea de Pueblos del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio (APIITDTT)
Congreso Nacional Indígena (CNI)
Juchitán, Oaxaca